Miércoles, Julio 1, 2015

"Esfuerzo, compañerismo, sacrificio, ilusión; compartimos valores con el remo"

Una empresa suele tener una serie de objetivos que se plantean a principios del año y de cuyo cumplimiento depende la buena marcha de la misma. Los objetivos suelen ser generales, de grupo, pero también individuales. En todo caso, es necesario trabajar de forma conjunta para lograrlos.

No es la primera vez que deporte y empresa se unen en función de unos valores concretos. En ocasiones es la empresa la que se apropia de los valores del deporte para fomentar una unión en los equipos de trabajo para mejorar su funcionamiento. Pero también los equipos deportivos han copiado estructuras y formas de trabajo de la empresa, especializando a determinados trabajadores en cosas concretas, dentro del conjunto.

En el Departamento Comercial de Lander, gracias al impulso de la Dirección de la empresa, solemos dedicar algunos momentos del día a reflexionar sobre las similitudes que tienen pequeñas cosas o actividades del entorno, como el deporte, con nuestro trabajo diario en la empresa. Todo ello, con el objetivo de que nos sirva de ayuda para hacer mejor nuestro trabajo cada día.

Una de estas actividades es el remo. De este deporte podemos sacar detalles importantes, que nos servirán para entender por qué unas embarcaciones avanzan más y por qué otras se quedan atrás, y con ello, extraer conclusiones de por qué unas empresas tienen éxito y otras no tanto. Vamos a verlo!

En el remo en banco fijo, una embarcación está compuesta por 13 remer@s y un patrón. La embarcación, se puede equiparar a los medios que tiene la empresa para avanzar. Cuanto mejores sean, más ligeras, etc., más fácil se navega. A medida que la empresa o el equipo cosecha éxitos, puede invertir más recursos en mejorar las embarcaciones y las instalaciones que tienen para prepararse. Todo ello, irá repercutiendo en resultados futuros.

La embarcación es importante, pero sin un buen patrón, no hay embarcación que valga! El patrón es una figura clave dentro del equipo. Es, al igual que la dirección de la empresa, quien tiene la tarea de dirigir el timón, quien lleva el rumbo. Un giro mal dado, demasiado temprano o demasiado tardío, hacen que el equipo se pare, que pierda segundos que quizá después no pueda recuperar. Pero no solo la dirección es su responsabilidad, sino que también es quien debe motivar y alentar a los remer@s constantemente a continuar esforzándose y corregir fallos que solo se pueden ver desde su posición. Todo ello, con el objetivo de unificar la remada y sacar lo máximo de cada componente del equipo. Cuanto mejor haga su trabajo, mejor preparado estará el equipo psicológica y técnicamente para remar mejor y avanzar más rápido.

Bajo esta dirección, estarían los 13 remer@s. Cada remer@ dentro de la embarcación, tiene sus tareas individuales y son seleccionados para cada puesto en función de sus capacidades individuales. Algunos son encargados de llevar el ritmo de la remada. Otros, por su mayor envergadura y fuerza se colocan en el centro, y los más ligeros están en la proa. Aunque cada uno tiene su función como vemos, una de las cosas más importantes para que el bote sea más rápido, es que la remada sea igual, que vayan a una y con la misma pasada desde que meten la pala hasta que la sacan. Cada milésima cuenta, por ello, es necesario ser autocrítico, metódico y sobre todo pensar que la actuación individual, está repercutiendo sobre los demás. Si todo ello funciona, que no es poco, el equipo, es un equipo ganador.

Pensamos que todos estos detalles importantes en el remo, son también aplicables a la empresa. Invitamos a todos a reflexionar sobre ello. En LANDER seguimos manteniendo y mejorando la remada día a día!